¿Qué debo hacer si estoy sufriendo un ataque de ransomware?

Un ataque de ransomware es una faena para cualquiera, y mucho más si tienes una empresa en la que el uso de ordenadores es imprescindible para el desarrollo de tu actividad, pero la primera regla si resultas infectado por este tipo de malware es no pagar nunca el rescate. Entonces, ¿hay manera de eliminar esta infección de tu equipo informático?

Lo primero que debes hacer es interrumpir la conexión a internet para que ese malware no se extienda a otros equipos informáticos de tu compañía.

El siguiente paso es realizar una limpieza completa de todos los sistemas y reinstalar el sistema operativo del equipo si fuera necesario. En este caso, no se puede garantizar la recuperación de todos los archivos. Por eso es importante tener siempre copias de seguridad de todos tus datos. Eso sí, siempre antes del ataque, no durante, o será peor el remedio que la enfermedad.

Otra cuestión esencial es contar con un antivirus actualizado en todos los ordenadores de la empresa. Y sería conveniente también revisar los correos electrónicos de la empresa y eliminar directamente todo lo que resulte sospechoso.

Pero ni siquiera todo eso evita que estemos expuestos a éste y otro tipo de ataques informáticos. Eso significa que lo mejor es proteger a tu empresa con un seguro como los de Caser, que te presta la asistencia más completa para evitar el ransomware y otros malwares con la instalación de una aplicación antisecuestro.

El significado de ransomware procede de dos términos en inglés: ransom (que quiere decir rescate) y ware (que es un acortamiento de la palabra software). Por tanto, la definición de ransomware se refiere a un tipo de programa informático que restringe el acceso a determinados archivos o partes de un sistema operativo que ha sido infectado.

Quienes sufren un ataque de ransomware son chantajeados con una cantidad económica, es decir, se les exige el pago de un rescate para poder eliminar la restricción que les impide hacer uso de su equipo informático con total normalidad.

Se trata de uno de los tipos de ciberataque que está más en auge en la actualidad y que bloquea los archivos o dispositivos de un usuario, que es avisado del 'secuestro' a través de un mensaje emergente en la pantalla del ordenador.

Aunque ahora está muy presente, este malware de rescate surgió por primera vez ya en los años ochenta. Entonces el pago del rescate debía efectuarse por correo postal. Ahora, los hackers exigen el pago mediante criptomonedas para evitar el rastreo de las autoridades.

Un ordenador se puede infectar de este tipo de malware mediante un spam malicioso con archivos adjuntos o enlaces que generalmente procede de una institución de confianza pero que, en realidad, es una simulación creada por los ciberdelincuentes para extorsionarnos.

Otros de los ejemplos de ransomware también puede proceder de publicidad maliciosa insertada en páginas web, incluso en las de confianza, y en la que ni siquiera es necesario hacer clic para infectarse.

Por eso es tan importante contar para tu empresa con un seguro como el de Caser, que proteja los datos y equipos informáticos de tu compañía en caso de sufrir una de estas incidencias, ya que después es muy complicado solucionar la infección y puede suponer un gasto tan costoso para tu compañía como pagar un rescate a los hackers.