Fibroma en la piel: qué es y cómo eliminarlo

Para definir un fibroma en la piel de manera breve, hablemos primero de su apariencia. Y es que se trata de una pequeña protuberancia que tiene el mismo color que la piel —en ocasiones, algo más oscuro— que no duele y que tiene un tamaño que puede variar. Es bastante común encontrarlo en los pliegues, como axilas, cuello o párpados.

En este sentido, utilizar collares que provoquen rozamientos en el cuello puede acabar propiciando la aparición de un fibroma. Aunque, normalmente debe hablarse en plural de estos crecimientos, ya que rara vez aparece uno solo, sino que lo hacen en grupo. Otra palabra para definirlos es los acrocordones, pero en ningún caso se trata de verrugas.

La principal diferencia entre una verruga y un fibroma en la piel es que la primera aparece debido a un virus, el del papiloma humano. Esto no sucede en el caso del fibroma, aunque los motivos por los que aparece los vamos a detallar a continuación.

Las razones por las que aparecen los fibromas en la piel son muy diversas, por lo que hemos elaborado un listado en el que recopilamos varias de ellas. Toma nota:

• Herencia familiar: si tienes un fibroma en la piel, fíjate en si hay más familiares que también presenten fibromas. Pueden ser tus padres, abuelos o cualquier otro pariente cercano. Y es que es habitual que estas protuberancias se transmitan de generación en generación. 
• Roces o fricciones: ya sea por el uso de cadenas o porque hablamos de los pliegues de la piel, como las axilas o las ingles, entre otros. No es posible prevenirlos, ya que no se puede evitar este tipo de fricción que propicia la aparición del fibroma en la piel. 
• Edad: los fibromas pueden aparecer también debido a la edad, de hecho, son frecuentes a partir de los 30 años o más, independientemente de si hay más miembros en la familia que los tengan o no.
• Factores hormonales: esto hace que las mujeres sean más propensas a sufrir fibromas en la piel, porque el embarazo, por ejemplo, puede desencadenar la aparición de este tipo de lesiones en diferentes pliegues y partes del cuerpo.

Ahora que ya sabes algunas de las razones por las que salen los fibromas, debes tener claro que en ningún caso se contagian. Esto solo ocurre con las verrugas, ya que es un virus la causa de que estas aparezcan, pero en el caso de los fibromas no se corre el riesgo de contagio en ningún caso.

¿Es imprescindible quitar un fibroma en la piel? La respuesta es que no, ya que no se trata de una lesión grave, sino que es benigna. Además, no hay riesgo de que en el futuro se convierta en cáncer de piel, por lo que, si no resulta molesto, no hay por qué quitarlo. No obstante, es verdad que para algunas personas los fibromas son antiestéticos e, incluso, pueden molestar al roce y sangrar si se dañan. Entonces, se puede valorar el eliminarlos. Pero, ¿cuál es el procedimiento?

Dependiendo del dermatólogo y las necesidades de cada paciente, se puede recomendar un tratamiento u otro para acabar con los acrocordones. Eso sí, después de haberse sometido a alguno de los procedimientos expuestos anteriormente, conviene tener en cuenta los siguientes consejos:

• Limpieza de la lesión: con un jabón neutro y agua hay que mantener la zona limpia para evitar que se infecte. De esta manera, también se evitará que quede una cicatriz más visible, sobre todo en los casos de cirugía.
• Protección solar: mientras la herida cicatriza es vital evitar la exposición solar y, en caso de que esto no sea posible, habrá que utilizar un protector solar con SPF 50. 
• Vendas o apósitos: si la zona tratada roza con la ropa y provoca molestias, se puede aplicar una venda o apósito que debe cambiarse a diario. De esta manera, la zona se mantendrá limpia y seca para que cure mejor.

El tratamiento de un fibroma en la piel suele ser mínimamente invasivo, excepto en aquellos casos en los que los acrocordones sean demasiado grandes. No obstante, si estás buscando un diagnóstico para saber si tienes fibromas o verrugas, nuestros seguros de salud Caser te dan acceso directo y libre elección con los dermatólogos/as más destacados del país.

Nota: El contenido de este artículo es meramente orientativo. En caso de presentar cualquier problema de salud, acuda a un centro sanitario. Toda sintomatología, diagnóstico o tratamiento debe ser valorado o prescrito por un especialista médico.