A la hora de calcular el valor de tu moto, este se puede concretar atendiendo a multitud de criterios tanto objetivos como subjetivos, en función de los aspectos que consideramos esenciales en cada supuesto.
Así, en el caso concreto del valor declarado o valor venal de una moto, para su determinación solamente se tienen en cuenta aspectos objetivos, como su marca, modelo, cilindrada o año de matriculación.
Por tanto, en esta valoración económica no se presta ninguna atención a aquellos elementos que, por el contrario, si serían sumamente importantes si deseases vender tu moto a otra persona, como son su kilometraje, estado de mantenimiento mecánico o conservación estética.
Este criterio de estimación del precio de tu moto se considera fundamental en el ámbito de los seguros, ya que será la cuantía económica a la que tendrás derecho en concepto de indemnización en el caso de que cuentes con un seguro de moto y, a causa de los daños provocados en un accidente, esta sea declarada como siniestro total.
El hecho de que la valoración de la indemnización a percibir en caso de siniestro total de tu moto esté relacionado con su valor declarado ofrece la ventaja de que se realizará únicamente a partir de criterios objetivos, evitando que esté condicionado por las diferencias de criterio entre diferentes peritos especializados.
Sin embargo, sí que es conveniente que tengas en cuenta que, a medida que pasen los años y tu moto vaya teniendo una mayor antigüedad, su valor declarado irá descendiendo hasta alcanzar un precio meramente residual.
En conveniente que tengas en cuenta este aspecto, ya que puede condicionar la posibilidad de hacer frente a la adquisición de una nueva moto con la indemnización económica a la que tendrás derecho si, por desgracia, sufres un accidente y, tras su peritación, esta se declara siniestro total.
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