En el ámbito de los seguros la prima de equidad se establece en aquellos casos en los que se detecta, por parte de la entidad aseguradora, una diferencia palpable entre el nivel de riesgo contemplado para el cálculo inicial de la prima del seguro y el riesgo real asumido por el titular del seguro o el bien asegurado.
Por tanto, el hecho de que se produzca un mayor o menor riesgo de que se produzca la ocurrencia de un suceso contemplado en las coberturas y garantías del seguro capacitará a la parte afectada para revisar el acuerdo inicial y establecer las modificaciones que sean necesaria para reajustar el acuerdo a las nuevas condiciones.
A modo de ejemplo, si cuentas con un seguro de coche una parte de la prima de tu seguro estará relacionada con el nivel de riesgo de siniestros en la dirección y localidad en la que tienes fijado tu domicilio, así como con el hecho de que dispongas o no de un garaje para su estacionamiento. En el caso de que te traslades a otra zona o localidad, o decidas no contar con un punto de estacionamiento, y no lo notifiques a la entidad aseguradora, las condiciones asociadas a la contratación de tu seguro habrán cambiado y, por tanto, esta podrá proceder a la aplicación de esta regla de equidad, como veremos más adelante, en caso de siniestro.
En la práctica, la aplicación de la regla de equidad se contempla para aquellos casos en los que, por cualquier causa se produzca un agravamiento del riesgo debido a acontecimientos sobrevenidos o imprevistos, ya que en caso de que este se debiese a la ocultación de información por alguna de las partes supondría la capacidad de que la parte afectada solicitase la anulación de la póliza de seguro.
¿CÓMO SE REALIZA LA APLICACIÓN DE LA REGLA DE EQUIDAD EN LA PÓLIZA DE UN SEGURO?
La regla de equidad se aplicará en caso de que se produzca un siniestro y la entidad aseguradora detecte que las condiciones fijadas inicialmente no se corresponden con las condiciones reales, debido, como se ha comentado, a una variación en las mismas o a un error involuntario de alguna de las partes, o de ambas.
Así, en el desembolso de la indemnización se aplicará un factor corrector sobre la cuantía inicialmente pactada, calculado a partir de la división de la prima de seguro pagada entre la prima de seguro que se debería haber aplicado conforme a las condiciones no contempladas.