Caries

Caries
Desde pequeños no enseñan que una caries es de las peores cosas que nos pueden pasar en la boca, ¡y que por eso debemos aprender a cepillarnos bien la boca! Eso sí, el peligro no pasa cuando nos hacemos mayores, pero… ¿sabemos exactamente qué es una caries?

Parece que, tras varios sustos, nuestra generación al fin ha aprendido que hay que cepillarse bien los dientes después de cada comida. Y lo ha aprendido a golpe de ver que los que no lo hacen pueden llegar a sufrir problemas de salud bastante serios. Uno de ellos son las caries, que suceden cuando el esmalte es erosionado por las bacterias que hay en el interior de la boca.

Los azúcares de la comida que ingerimos fermentan en nuestra boca. Este hecho, unido a una mala rutina de cepillado e higiene bucal, hace que el ácido generado por dichas bacterias termine dañando los dientes hasta el punto de generar una cavidad en ellos. Las caries son una enfermedad infecciosa que puede llegar a generar problemas muy serios.

Hace unos años, un equipo de fútbol español de élite sorprendía llevando a toda su plantilla a una revisión dental como parte de su reconocimiento médico. Sus doctores eran muy conscientes de que un problema bucal podía acabar con la temporada de alguno de ellos. A nosotros, por lo general, una caries no nos exime de acudir a nuestro puesto de trabajo, pero os aseguramos que puede llegar a hacérnoslo pasar bastante mal, también a nivel económico..

Cada vez es más habitual que decidamos contratar un seguro dental, y resulta importantísimo que nos aseguremos de que los tratamientos anticaries están incluidos en él. ¿Por qué? Pues porque no todos sabemos cepillarnos los dientes a la perfección y esta dolencia es de las más habituales en las consultas dentales. Además, si tenemos pequeños en casa este riesgo se multiplica, ¡en ese caso no habría que pensarse dos veces el hecho de adquirir una cobertura dental!

¿CÓMO SE PUEDEN PREVENIR LAS CARIES?

Evitarnos un problema como este resulta sencillo si contamos con un profesional dental que nos cuide y adquirimos ciertas costumbres muy beneficiosas para nuestra salud:
 

  • Cepillarnos después de cada comida, haciéndolo desde la encía hasta el borde del diente y nunca durante menos de dos minutos.
  • Limitar el consumo de azúcar a lo estrictamente necesario. Esto, además de velar por el bienestar de nuestra salud bucodental, también nos ayudará a mantener la línea.
  • El uso de productos de higiene bucodental ricos en flúor resulta harto beneficioso a la hora de prevenir este tipo de infecciones.
  • Acudir a una clínica dental de confianza para aplicar selladores en las posibles fisuras en las que las bacterias puedan hacer más daño.

TRATAMIENTOS MÁS HABITUALES CONTRA LAS CARIES

A pesar de tomar todas las precauciones posibles, es posible que nuestra predisposición genética nos haga más propensos a sufrir caries. Por eso conviene asegurarse de recibir la mejor atención dental llegado el caso:
 

  • El tratamiento más habitual contra las caries es el de eliminar las lesiones blandas del diente para así sanearlo.
  • Además, si resulta pertinente, nuestro dentista puede decidir restaurar el diente, hacer una endodoncia o incluso poner una funda sobre la lesión para protegerla al máximo.