Plan de pensiones
Invertir en un plan de pensiones es una excelente decisión si deseas disponer de un instrumento de ahorro e inversión que te permita mantener o, si lo deseas, incrementar tu poder adquisitivo una vez llegado el momento de tu jubilación.
A grandes rasgos, un plan de pensiones se caracteriza por su utilidad como producto financiero a largo plazo, dirigido a servir de complemento en el futuro a la pensión pública que recibirás cuando te jubiles.
En este sentido, consideramos preciso aclarar que la elección de contratar un plan de pensiones para tu jubilación no implicará, en modo alguno, que te veas obligado a renunciar a la pensión que te corresponde por tu cotización a la Tesorería de la Seguridad Social, ya que ambas no solo son complementarias, sino que en este aspecto es donde radica uno de los principales beneficios de este instrumento de ahorro, como fuente de ingresos adicional cuando finalices tu vida laboral.
Asimismo, los planes de pensiones ofrecen otras ventajas sumamente atractivas, relacionadas con el tratamiento fiscal de las aportaciones en tu declaración anual del IRPF.
¿CÓMO FUNCIONA UN PLAN DE PENSIONES?
En un plan de pensiones la rentabilidad se obtiene a partir de los rendimientos que generan las aportaciones que decides realizar periódicamente, así como aquellas aportaciones extra que lleves a cabo de forma voluntaria a lo largo de su periodo de vigencia.
De esta forma, en función del plan de pensiones elegido, tu capital invertido irá generando gradualmente una plusvalía, que podrás rescatar, en forma de renta periódica o mediante una prestación única.
Así, contratar un plan de pensiones es invertir poco a poco en tu futuro, casi sin darte cuenta, para asegurar la obtención de unos rendimientos económicos que garanticen tu tranquilidad y bienestar en el futuro.