Los retos de los planes de empleo en España: conciencia de ahorro, y estímulos fiscales y financieros
Solo un 3% de las pymes españolas cuenta con algún tipo de producto de ahorro para su plantilla, un porcentaje que se reduce al 1% si nos centramos en Planes de Pensiones de Empleo (PPE), los promovidos desde las compañías o instituciones públicas.
Se trata de una situación que todos los afectados - empresas, trabajadores y administraciones- quieren mejorar. De hecho, el objetivo del Gobierno es que pymes y autónomos, mayoritarios dentro de la economía española, se incorporen cuanto antes a la previsión social complementaria, mediante Fondos de Pensiones de Empleo de Promoción Pública y de Planes de Pensiones de Empleo Simplificados, fórmulas que aún están en fase de definición y tramitación.
Para debatir sobre el contexto actual de los planes de pensiones y los futuros vehículos, Observatorio Caser organizó el 26 de octubre el encuentro informativo Planes de pensiones de empleo: a la espera del necesario impulso del segundo pilar. Un acto que contó con la participación de Elisa Ricón, directora general de INVERCO; Celia Ferrero, vicepresidenta de ATA, la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos; Asier Uribeechevarría, vocal de WealthTech de AEFI, la Asociación Española de Fintech e Insurtech, y Eva Valero, directora del Observatorio de Pensiones de Caser, como moderadora del debate.
Eva Valero recordó que “el 65% de las pymes de hasta 50 empleados ni siquiera conocen, ni han oído hablar de los Planes de Pensiones de Empleo”, según un informe elaborado por Observatorio Caser.
¿Cómo es posible? En opinión de Elisa Ricón, no hay desarrollo del sistema de empleo porque la población no es consciente de su necesidad y utilidad, “ni hay estímulos financieros ni fiscales”. A lo que Celia Ferrero añade que “si no hay una rentabilidad económica y un incentivo, no se utilizan”.
Para Asier Uriebeechevarría, como producto financiero que son, los planes “han de tener flexibilidad, personalización, eficiencia y responder a su objetivo de rentabilidad. Y eso, de momento, no existe. Y como no existe la gente no lo demanda ni la industria lo ofrece”, criticó. De hecho, el vocal de WealthTech de AEFI considera absolutamente necesario poner en marcha un sistema de cobertura complementario, “ante la insuficiencia de los existentes, agravada por la baja eficiencia en términos financieros y de digitalización de los modelos actuales.
Además de defender que “la eficiencia llegará con economías de escala y con volumen”, la responsable de INVERCO resaltó que “el segundo pilar tiene una permeabilidad que no tiene el tercero [planes de pensiones privados individuales]”. No obstante, prosiguió, “no es necesario elegir entre unos u otros”.
Respecto a los modelos a seguir, los expertos coincidieron en la necesidad de adaptar los sistemas vigentes en diferentes países europeos a las especificidades de nuestro país. “Esto debería permitirnos importar las mejores soluciones: apuesta por el segundo y tercer pilar, mecanismos de autoadhesión, incentivos fiscales y financieros, flexibilización en el funcionamiento o información a trabajadores, entre otras. No se trata de inventar la rueda, sino de arrancar el coche”, resumió Ricón.
El caso singular de los autónomos
En el encuentro organizado por Observatorio Caser se abordó con detalle la situación especial de los trabajadores por cuenta propia, un colectivo que hasta ahora no tiene acceso a los planes de empleo y solo puede utilizar los individuales. En este punto Celia Ferrero recordó que, según las últimas noticias, las aportaciones máximas a este tipo de vehículos van a volver a disminuir, posiblemente hasta los 1.500 euros anuales, lo que supondría “un castigo injusto para una parte muy importante del tejido productivo de nuestro país, los autónomos, que, por el momento, es la única opción con la que cuentan para complementar su pensión pública”. Además, uno de los principales problemas de los autónomos a la hora de realizar cualquier inversión es la periodicidad en las aportaciones “porque sus ciclos de liquidez cambian, y ahí está la clave”.
“Mi pregunta es si podemos seguir con el desarrollo del segundo pilar sin tener consenso sobre el primero [las pensiones públicas]. Necesitamos una visión integral sobre la reforma del sistema público de pensiones y de la previsión social complementaria. Una cosa sin la otra no tiene mucho sentido. Hay que pensar muy bien hacia el modelo al que queremos ir”, concluyó la presidenta de ATA.
Durante el debate también se mencionaron otras opciones para ir preparando financieramente el futuro. En ese sentido, Uribeechevarría apuntó a “plataformas de digitalización financiera, sistemas de ahorro por redondeo, así como ahorrar por objetivos en función de cada momento”.
En cualquier caso, todos los expertos coincidieron en la necesidad de fomentar la educación y cultura financiera a todas las edades y apoyarse en la digitalización para ofrecer productos financieros que se adapten a las diferentes necesidades y los perfiles de los ahorradores.