Este evento ha reunido a expertos y público en general para debatir y analizar el impacto de las fake news en la percepción pública y la distorsión de la realidad.
Durante la jornada, se discutió sobre los tipos de fake news y cómo éstas, difundidas especialmente a través de redes sociales, tienen la capacidad de manipular la opinión pública y crear una realidad paralela. Las noticias falsas no solo afectan a individuos, sino que también pueden tener consecuencias graves para la sociedad en su conjunto, incluyendo la polarización política, la desinformación sobre temas cruciales, como la salud y la seguridad, y la erosión de la confianza en los medios de comunicación tradicionales.
El evento contó con la participación de Celia Bermejo, periodista, presentadora y locutora, quien aportó su dilatada experiencia en el análisis de esta problemática. Bermejo, mediante ejemplos claros y vistosos, compartió con los asistentes su visión sobre el fenómeno de las fake news, subrayando la importancia de la alfabetización mediática y la responsabilidad, tanto de los medios de comunicación, como de los usuarios de las redes sociales.
Durante la jornada también hubo tiempo para hablar de las deepfakes, es decir, vídeos manipulados por inteligencia artificial que se crean para engañar a los espectadores, haciéndoles creer que una persona específica, ya sea anónima o una figura pública, está llevando a cabo declaraciones o acciones que nunca tuvieron lugar.
Para evitar caer en el engaño, la experta destacó la importancia del “fact checking”, o verificación de hechos, y debatió junto con el resto de los asistentes sobre algunos detalles que pueden entrever cuándo una información es falsa. Igualmente, compartió consejos y pasos que se recomienda realizar antes de asumir cualquier información como verídica, subrayando la necesidad de verificar las fuentes y las firmas de las noticias, especialmente.
Celia Bermejo afirmó que “la propagación de fake news es una amenaza real para la integridad de nuestra información y la cohesión social. Es esencial que aprendamos a identificar y cuestionar la información que consumimos, y que los medios de comunicación y las plataformas digitales asuman un papel activo en la lucha contra la desinformación”.